martes, 9 de mayo de 2017

Un concierto prescindible


Hay bastante verdad cuando se dice que el Flamenco viene del sur, pero sería una barbaridad decir que el Flamenco viene de Brasil. Viene esto al caso del último espectáculo del Teatro Central, dentro del ciclo “Flamenco viene de sur”.


Rubem Dantas (Salvador de Bahia, 1954) es un extraordinario cajista con un toque sutil, medido y respetuoso con los demás instrumentos. Es más, desde hace ya muchos años su nombre forma parte de la historia de este arte, gracias a su participación en el sexteto de Paco de Lucía, pero “Cajón Tour” tiene muy poco de Flamenco: apenas un tema de Paco de Lucía (“Tema de amor”), una muy personal soleá de Justo Heredia (“Las manillas del reloj”) y la penosa intervención de La Susi, incluida en el elenco de Dantas para actuar en Sevilla, pero salida de una importante afección de garganta. Dantas anunció también un tema por verdiales (“Julia”) y otro por tanguillos (“Al sur de su cintura”), cuyo compás me resultó completamente irreconocible.
Cajón Tour, dividido en dos partes —no sabemos por qué—, empezó interesando, para ir poco a poco cansando y terminar aburriendo. Es justo, sin embargo, mencionar también la actuación de José Fernández a la guitarra, Saray Fernández La Pitita al baile, y destacar la de José María Pedraza al piano y, muy especialmente, la de Joaquín Sánchez al clarinete y la armónica.
El público, que en Sevilla lo aplaude absolutamente todo, aplaudió un poquito al final casi por compromiso. Y es que si se ofrece Flamenco —muy especialmente en un ciclo dedicado específicamente a esta música— hay que dar Flamenco.
                                                                                                               José Luis Navarro